En el marco de las celebraciones por el mes de la Calidad 2023, es necesario destacar la valiosa influencia que ejerce la calidad sobre los diversos sectores de la sociedad. Desde la seguridad alimentaria hasta la calidad educativa, la constante búsqueda de la excelencia en la calidad se ha edificado como un importante pilar para el bienestar de las personas. Por ello, durante este mes es importante reflexionar y percibir a la calidad como un elemento que permite construir y afianzar una cultura que promueva el progreso en la sociedad.
En el contexto empresarial, la calidad es un elemento que puede otorgar una ventaja competitiva para las organizaciones. La calidad no solo debe limitarse a una certificación simbólica que obtiene la organización, sino también debe interiorizarse como una herramienta que garantiza la elaboración de productos y servicios que cumplan con estándares de calidad rigurosos. Todo ello con la finalidad de lograr la satisfacción del cliente y establecer una base sólida para la búsqueda del éxito organizacional.
La influencia de la calidad no solo se limita al ámbito empresarial, pues la calidad también puede erigirse como una ventaja competitiva para el desarrollo profesional y personal. La adquisición de competencias relacionadas con la calidad no solo extiende las perspectivas y las oportunidades laborales de la persona, sino también estimula su crecimiento personal y el interés por capacitarse y mejorar constantemente. Además, estas competencias influyen en la toma de decisiones, la capacidad para enfrentar desafíos y la resolución de problemas. Por lo tanto, la calidad se puede entender como un recurso que empodera a las personas y les impulsa a lograr la excelencia.
Otro punto para destacar es la importancia de contar con profesionales de la gestión de la calidad y cómo aprovechar su potencial competitivo. Los profesionales de la gestión de la calidad tienen la responsabilidad de fomentar la cultura de la calidad en toda organización, implementar un sistema de gestión de la calidad en sus organizaciones y mejorar los procesos de estas. Incluso, sus labores se extienden hasta garantizar el cumplimiento de los estándares más exigentes, así como mostrar liderazgo y comunicación efectiva dentro de la organización. Por ello, en un entorno donde la calidad es esencial, la demanda de profesionales de la gestión de la calidad continúa en aumento. Esto destaca la importancia de seguir fomentando y formando profesionales capacitados y expertos en el campo de la calidad que puedan responder ante las necesidades tanto del mercado como de la sociedad.
En síntesis, la calidad es un elemento fundamental, tanto para las organizaciones como para la sociedad, que influye positivamente en nuestro día a día. Desde el Instituto para la Calidad, con la finalidad de renovar nuestro compromiso de promover la cultura de la calidad en nuestro país y fuera de él, saludamos este 9 de noviembre a los profesionales de la gestión de la calidad y toda la comunidad involucrada por su esfuerzo y el rol que desempeñan en el logro de la excelencia mediante la calidad.